Noticia publicada a las 01:25 am 14/05/25

Por: Rodolfo Ruiz.

Aunque el Plan Estatal de Desarrollo 2024-2030 ya se aprobó el 11 de abril y el 9 de mayo pudo conocerse con detalle al publicarse en el Periódico Oficial del Estado, sus metas y proyectos detonadores parecen muy modestos para el tamaño de las necesidades y problemas de la entidad.
De los 30 proyectos transformadores para el sexenio que se enuncian en el documento,

los más importantes son la Universidad del Deporte, las Casas de Maternidad por Amor a Puebla, un Parque Acuático en la región Cola Lagarto de la Mixteca, la construcción de estaciones del Tren México-Puebla-Veracruz, y la rehabilitación de dos carreteras: la que va de Tetela de Ocampo a Ometeptl y de esta comunidad a Huahuaxtla, en la Sierra Norte de Puebla.
Otros proyectos que el Plan Estatal de Desarrollo (PED) 2024-2030 considera como estratégicos para el progreso y crecimiento de la entidad son la construcción de un puente que sustituirá La Panga en San Baltazar Tetela, un Distribuidor Vial en el bulevar Hermanos Serdán, la reactivación del Tren Turístico que ahora se ampliaría de Cholula a Atlixco e Izúcar de Matamoros, la ampliación de la red de ciclovías, y la creación de la Universidad y del Valle de la Tecnología y Sostenibilidad en San José Chiapa.
¿Usted cree que con estas obras y proyectos Puebla se convertirá en una de las entidades más competitivas y de mayor desarrollo del país?
¿Que con estas acciones del gobierno de Alejandro Armenta Mier el estado de Puebla y su capital volverán a ser potencia en generación de riqueza y aportación al Producto Interno Bruto del país, después de la Ciudad de México, ¿el Estado de México, Nuevo León, Jalisco y Guanajuato o de ciudades como Monterrey, Guadalajara, Saltillo y Querétaro?
¿No será que, con estos modestos proyectos de transformación, por no decir mediocres, nos acercamos más a los estados coleros de la República Mexicana como Chiapas, Guerrero y Oaxaca?
Varias son las cuestiones que llaman la atención del documento aprobado por el Comité de Planeación para el Desarrollo del Estado de Puebla (COPLADEP) el pasado 11 de abril, entre ellas que no haya una sola mención o alusión a la problemática por la que atraviesa la principal rama industrial de la entidad, la automotriz y de autopartes, por la incertidumbre internacional y nacional derivada de la amenaza de aranceles del gobierno de Donald Trump en los Estados Unidos.
El Plan no prevé una alternativa frente al posible colapso de la industria automotriz y el despido de miles de trabajadores y técnicos de las empresas de este clúster, entre ellas Audi y Volkswagen que hoy tienen suspendidas sus exportaciones a Estados Unidos.
El PED 2024-2030 no establece metas de crecimiento económico, ni de generación de empleos, tampoco contempla la creación de nuevos polos de desarrollo, ni de parques industriales en regiones de alta concentración poblacional como Tehuacán y San Martín Texmelucan.
Lo más que plantea es aumentar el PIB de 852,625 millones de pesos en valores actuales a 889,284 millones de pesos en 2030.
Según el PED, el gobierno de Armenta pretende reducir el porcentaje de población en situación de pobreza de 54 a 48.53%; aumentar el promedio de escolaridad de los poblanos de 9.43 a 10.36 años; y bajar la tasa de incidencia delictiva por cada 100 mil habitantes de 38,642 a 34,778.
En materia de seguridad, la administración estatal prevé elevar la tasa de personal sustantivo de la Fiscalía General del Estado (FGE) por cada 100 mil habitantes de 31.32 a 37.98, incrementar la confianza en la Comisión de Derechos Humanos de 61.14 a 69.44 y bajar la tasa de prevalencia de corrupción por cada 100 mil habitantes según trámites realizados en instituciones estatales de 11 mil 897 a 11 mil 200 para 2030.
El Plan Estatal de Desarrollo no considera entre los proyectos estratégicos la instalación de una empresa fabricante de autobuses eléctricos en la zona de San José Chiapa, que sería clave en la conversión del parque vehicular de transporte público de pasajeros, como se había anunciado el año pasado. Sí insiste en el desarrollo del Valle de la Tecnología y la Sustentabilidad, pero sin precisar qué empresas de tecnología se asentarán ahí, ni qué tipo de productos y energías limpias generarán de aquí al 2030.
En suma, nada que vaya a revertir la tendencia decadente que registra la economía de la entidad desde hace una década.
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Fuente: E-consulta.

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