Noticia publicada a las 04:30 am 20/08/24

Por: Rogelio Martínez Huerta.

De no ser por los casi 200,000 mil muertos y los más de 100,000 mil desaparecidos. La cuatro T sería un mito más de tantos que AMLO prodiga a sus seguidores, diariamente en su mañanera que publicita mitos geniales, dislates, improvisaciones y lucubraciones salidas de orden político y muestra de grave desinformación al pueblo mexicano.

La pobre gente del país, no se ha percatado de que, por estadística, las cuentas oficiales son puras mentiras y celestiales devaneos políticos. La causa es obvia, se trata de que el pueblo crea su estilo de hacer política que superó a varios sexenios del PRIAN, quienes mintieron por sexenios, pero nunca con la efectividad estadística tan procaz como hoy.
Mentir con estilo, que tal efecto es el hombre, le ha dejado a López Obrador una cauda de admiradores totalmente carentes de sentido común y de síntoma informativo. La causa débese a que, merced a los apoyos nimios que Andrés Manuel ha otorgado al pueblo miserable y de que ha duplicado la verdadera cantidad, pues dio resultados más que elocuentes obteniendo casi 36 millones de votos para Claudia S. que será la presidenta, sin tener conocimiento de lo que es política, pero que fácilmente será engañada desde Palenque, de donde Andrés lanzará sus vibraciones a la presidencia, para que la dama de gran preparación científica no cometa tantos errores. Detentando el poder López Obrador en Morena, gracias a María Luisa Alcalde Lujan que va como moza de estribo a dirigir un partido que no es partido, que no regeneró más que nuevos millonarios y que de paso la transformación que logró fue duplicar la cantidad de riquezas de los grandes magnates que fueron cooperantes de gran envergadura con López Obrador.
Allá, en la lúgubre distancia se pueden quedar esperando justicia los habitantes de Morelos, Puebla, Veracruz, Oaxaca, Edo. De México, Chihuahua y Campeche. Porque la enorme corrupción de sus exgobernadores futuros, no alcanzarán ni la cárcel, ni el repudio general, porque en cada mañanera los vitorea don Peje, pero también pondera su honradez tan exigua que da pena ajena ver como engaña al pobrerío y ni cuenta se dan.
Mientras tanto, arriban los diputados y los senadores de Morena, el Verde y el P. T. que con votos fraudulentos llegaron a sus curules, para hacer mayoría y dar una sopa de su propio chocolate a la Suprema Corta, a los grandes millonarios de la derecha y de paso, acabar con el sueño político del PRIANRD y los otros partidillos manobreros que eran tan solo franquicias electoreras a las que el sistema político prodigaba tantos favores y tantos recursos además de facilidades desde el INE y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, mientras la Fiscalía General de la República soñaba el sueño de los justos.
Antes lo evidente, se termina el sexenio; López Obrador se irá llorando, porque no logró la reelección que ensayó en los municipios y que fue un grave fracaso, porque aquellos que se lograron relegir solo se quedaron a robar de nueva cuenta y hay cientos de municipios que por seis años saquearon el erario municipal e infringieron un grave daño a las Leyes de México que son, serán falsas y seguirán adelante, para deterioro del futuro de los adultos mayores, las mujeres, los niños y la juventud de México. ¡Ah! pero que bonito será gritar dentro de un MES ¡Era un honor transar con Obrador! Porque al final, todo fue una maldita farsa. Así es…

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