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o dio a entender que el tigre que cada día tiene más rayas puede defender la votación del 2J, gane o pierda.
Lo de la preseleccionada cinco años ha, recipiendaria del bastón de mando, coqueteó con alumnado y profesorado universitario, o lanzó la advertencia de que del lado de la élite de poder a la que pertenece, está el monopolio de la violencia-fuerza legítima-grupos de defensa. Ni una ni otra tesis dejó clara, por la ambigüedad del mensaje político, dejando la libre interpretación para quien, teniendo oídos, oiga.
La primera vez que evocó el 68 en el tercer debate presidencial, se creyó que había sido un despropósito que dejó de serlo cuando la candidata de Palacio Nacional lo hizo dos y tres veces más. La insinuación de un probable «Golpe de estado» o de un «Fraude electoral», como han soltado en Palacio Nacional, no tiene lectura aparte del tema del 68, sino forma parte de un todo que interesa por lo que sugiere.
El ataque armado de Estado contra estudiantes, profesores y ciudadanos de 1968 fue una carnicería brutal por despiadada, planeada su estrategia en los sótanos del poder presidencial o de los más amplios escritorios del gobierno de México, de Palacio Nacional o de la Secretaría de Gobernación, ejecutada al pie de la letra con pólvora negra y plomo recubierto.
El autor intelectual de la represión que concluyó en matanza, fue el presidente de México o el secretario de Gobernación, Gustavo Díaz Ordaz [Litempo 2] y Luis Echeverría [Litempo 8], por cierto, según registros de prensa, agentes de la Central de Inteligencia estadounidense, bajo esas claves.
Cuando el Movimiento de 68, Sheinbaum contaba 6 años. Entre los 18 y 20 años ingresó a la UNAM, a nivel licenciatura. Su activismo estudiantil no fue contra la represión ni por las víctimas de la masacre del octubre imposible de olvidar, sino por la huelga universitaria de hace 25 años, la más larga de la historia, por el disenso entre estudiantes y autoridades de gobierno, quienes, al entremeterse y violentar la autodeterminación universitaria, intentaron imponer un sistema de pagos que fracasó y sin mayores perjuicios.
Ese activismo político de hace 25 años fue en defensa del carácter público y gratuito de la Universidad Nacional, en absoluto comparable con el M68 que evocó Sheinbaum en el tercer debate presidencial, estrenando por cierto tono de voz diferente, contrastante con la posibilidad de advertencia del despertar de un gran tigre siberiano, gane o pierda la votación dentro de 10 días.
letraschiquitas
Debía saber Guadalupe Taddei que el color oficial del Instituto Nacional Electoral no es rosa, sino rojo —Rhodamine 233—, y que cambiarlo por decreto supone una irregularidad, además de un abuso si no fue autorizado por la Comisión General Ejecutiva, como el cometido ayer al enviar papelería oficial con otro color***. Mientras el influyente diario británico Financial Times publicó un amplio reportaje a plana completa titulado Cómo han prosperado los cárteles de la droga de México con López Obrador, The Wall Street Journal consigna que el próximo gobierno de México podría ser un aliado de Occidente con Xóchitl Gálvez o más afín a Cuba y Venezuela, como con AMLO, con Claudia Sheinbaum***. Mientras México está en boca de los medios del mundo, el presidente Andrés Manuel López Obrador riñe con una reportera, Reyna Haydee, porque le dijo que MORENA, su partido, ha reclutado panistas corruptos, como Guillermo Padrés, encarcelado por desvíos millonarios, como Eugenio Hernández, del PRI, ahora candidato del Verde.
Fuente: Índice Político.
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