así como el saber que se tiene depresión y no tratarse con un profesional de la salud, puede poner en riesgo la vida. Si se tienen síntomas de depresión, en este caso es acudir con el siquiatra y a terapia emocional paralelamente, ya que el tratamiento farmacológico sin la terapia psicoemocional la probabilidad de cura no se garantiza. Si no se detecta a tiempo, puede llegar a una fatalidad, así como el saberlo y no empezar un tratamiento controlado.
La tristeza todos la hemos experimentado en algún momento de la vida, sí o sí, es inherente al hombre, es decir que es inevitable que en ciertos momentos sintamos este estado de ánimo que es normal y no dura por mucho tiempo, podemos estar tristes, pero la alegría llega finalmente después de cierto tiempo, puede ser de inmediato, por la resiliencia, o bien, porque es normal, no es una enfermedad como la depresión. Y la depresión no todos la han padecido. La tristeza puede ser porque falleció un ser querido, o un divorcio, pero no necesariamente tiene que llegar a una depresión, sólo la tristeza por el duelo en ambos casos. La tristeza no te limita a seguir con tu vida normalmente, con tus actividades, y en la depresión sí ya se ve comprometido, es decir, sí empieza a ver una limitación en las actividades diarias. Ya la vida misma se ve limitada.
¿Cuál es la diferencia de la tristeza y la depresión?
Entonces decimos que la tristeza es una emoción normal por un acontecimiento puntual, que no suele durar tanto. La depresión aparte que es falta de químicos en el cerebro, impiden que los segregue normalmente. Como comenté anteriormente, afecta en todas las áreas de la vida, como no poder ir a trabajar, no comer, no dormir, la fatiga se hace presente. Algunos síntomas de depresión serían también el enojo, irritabilidad, falta de concentración, inseguridad, imprecisión a la hora de tomar decisiones, así como la dificultad de poder comunicarse con las personas.
La distimia, que son síntomas crónicos, a largo plazo con intensidad leve, la autoestima se ve afectada seriamente. Esto es si llevas tristeza por más de dos años, sin energía, sin interés de las cosas, desvalorización de su persona. Es más leve que la depresión mayor, pero de mayor duración. Insuficiente alimentación, o excesiva. Las personas con distimia pueden acostumbrarse al estado depresivo leve y no atenderse. Este también requiere de atención siquiátrica y terapia sicoemocional.
En cuanto a qué pasa con nuestro cerebro cuando se está deprimido, los neurotransmisores cerebrales que regulan el funcionamiento del cerebro, están bloqueados o disminuidos cuando hay depresión, que pueden ser la dopamina, la serotonina, melatonina y noradrenalina. Y dependiendo de qué neurotransmisores estén disminuidos será el tratamiento farmacológico a seguir. También se presentan interrupciones en sus conexiones neuronales, es decir no hay conexiones simpáticas porque para que esto se realice, los neurotransmisores deben estar presentes para que por medio de estos químicos pase la información de una neurona a otra. Las áreas cerebrales que trabajan de manera conjunta para procesar las emociones se desacoplan en las personas que sufren trastorno depresivo.
La amígdala, que es como una avellana, esté implicada en los procesamientos de las emociones, esta se desacopla en la red emocional de las personas con episodios depresivos. Esta interrupción podría provocar que el procesamiento de la transmisión emocional resulte menos preciso, razón por la que los pacientes con depresión perciben a menudo la información neutra como negativa, afirman los autores. Hay que tener cuidado en la rumiación, es decir un pensamiento repetitivo. Esto sucede con la hiperconectividad.
Síntomas de depresión para solicitar ayuda con un siquiatra y con un terapeuta sicoemocional son:
– Sentimientos persistentes de tristeza, ansiedad o “vacío”;
– Sentimientos de desesperanza o pesimismo;
– Sentimientos de irritabilidad, frustración o intranquilidad;
– Sentimientos de culpabilidad, inutilidad o impotencia.
– Ideas suicidas.
– Pérdida de la confianza y de la libido.
– Falta de interés por lo que le gustaba hacer antes.
– Trastorno del sueño. Falta de apetito, cansancio extremo.
Si tienes estos síntomas no dejes pasar más tiempo, es urgente, contáctame por WhatsApp al 844 22 77 0 66.
La vida es maravillosa cuando se tiene salud, recupérala si la has perdido.
Un abrazo fraterno, su amiga y terapeuta Verónica Marroquín. Diosito por delante.
Fuente: Zócalo de Saltillo.
[Regresar a la página principal] |