Noticia publicada a las 01:18 am 17/05/19

Por: Rogelio Martínez Huerta.

Sin la presencia en las urnas de Andrés Manuel, sin dinero para atraer el voto popular que se acostumbró a que le prodiguen los refrescos y los “lonches” cuando menos, sin ánimo para andar de matraquero de forma gratuita, ya el pueblo no acude a las invitaciones del PAN, menos a la del PRI y tampoco a las de Morena, con un candidato al que no ve con buenos ojos, porque es muy “simpático” con sus gritos y sus regaños constantes tanto en público como en privado.

¿Pues qué pasa ahí? Simplemente que el PAN volvió a su viejo discurso que se terminó con las lacras de Anaya el canalla, se metieron otra vez los mismos esqueletos anquilosados que eran tan duros como los fierros del Yunque al que servían como buenos derechosos de aquella época de grisura y oscuridad. Tiempos de atar en que la iglesia con sus anatemas ridículas, espantaban a la gente de Puebla con las furias del infierno, si no votaban por Ana Teresa, el Tigre coronado (Hoy gatito desdentado por la edad) Lalo Rivera al que la mala fama lo volteó contra la pared con otra derrota calculada, y otros más como Frayle, Etc.
El caso del PRI es más grave, porque entre la gente que labora la campaña de Jiménez Merino viene gente de la peor ralea y mala fama por ladrones, que se enriquecieron con Mario Marín, quien ya encontró paz y sosiego con una breve detención de la orden de aprehensión por sus pendejadas de títere de los libaneses más pinches de la historia de Puebla y hasta de Tehuacán.
El caso de Morena en la ciudad de las granadas, donde el “hijo político” de Miguel Barbosa hace y deshace con sus constantes torpezas, ladronadas y pendejadas es simplemente patético. ¿Cómo puede ganar Morena si no saben, ni pueden llenar cinco camiones para enviarlos a rellenar algún mitin a Barbosa que anda inventando la política, porque siempre fue político de representación proporcional y jamás había hecho campaña; es más ni la hace, porque todo lo que le organizan está tan mal, que les sale peor.
Claro que si leemos a las plumas pagadas, todo está a toda madre para preparar el fraude, empezando por la encuesta de salida que lo dará por ganador, aunque pierda y todas esas transas electoreras que se hacen y hacían en el PRIAN, que sigue vivito y coleando en Morena de Puebla, porque para allá apunta el estilo de hacer política de Pacheco Pulido, Manzanilla, Stefan Chidiac y sus plumíferos oficiales. Es decir, simulan “ganar”, para ganar a través del fraude, tal y como lo hizo Moreno Valle el año pasado.
Lamento señalar qué algo falta, son los paquetes de billetes con los que se compraron estructuras electoreras hasta de Morena en Tehuacán. Dinero que repartía a manos llenas Juan Cesín Musi, ahora retirado por la edad, la tristeza, la falta de calor de los billetes verdes y, porque al desaparecer Moreno Valle, todos los mapaches, “ingenieros electoreros”, testaferros, cuadros, “panistas” radicales, simpatizantes del dinero fácil, cómplices de un endeudamiento criminal de Puebla y triunfadores de una elección maldita que terminó mal, se desanimaron, guardaron lo que atesoraron y se retiraron a la vida discreta, mientras los más indignos y arrastrados se fueron con Barbosa.
Por eso vale la pena preguntarse ¿Ganará Morena en Puebla? La respuesta es categorial, usted lector la tiene en su mente… Y si tiene dignidad me dirá que no… Porque no es lo mismo el Movimiento de Andrés Manuel hace diez meses, que la parafernalia que ahora empieza a desproteger a Miguel Barbosa y los asalta-presupuestos que lo rodean ¡A Redo vayan! Que de mí nunca tendrán… ¡Frates sobre Stote et vigilate!… Háganlo…

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