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De 1988 al 2018, media el sacrificio de 484 muertos…
Noticia publicada a
las 03:06 am 01/12/18
Por: Rogelio Martínez Huerta.
La ruptura con el Sistema de Cárdenas, Muñoz Ledo, Ifigenia Martínez y decenas de políticos que no aceptaron la instauración de una política neoliberal, realizada por Miguel de la Madrid, teniendo atrás a Carlos Salinas y varios agentes del capitalismo internacional, ocasionó un mundo de inquietud política que trascendió hasta las elecciones del 88 que ganó Cuauhtémoc Cárdenas y le negaron los esbirros del imperio,
porque el objeto fue privatizar los bancos en beneficio de los intereses de la Banca Internacional, privatizar las empresas que pasaron a poder de los capitostes amigos de Salinas, pero de paso ir haciendo entrega de fracciones de México por así convenir a los grandes capitalistas del petróleo en Estados Unidos. Lo que predestinó la asunción de otro egresado de las escuelas de los Chicago Boys que llegaban a servir a esos intereses ultra nacionales, como lo hizo Ernesto Zedillo que les privatizó y regaló los Ferrocarriles Nacionales en un momento en que todavía beneficiaban a los pobres de la nación.
A lo largo del país la inconformidad acompañó a los políticos que iban tejiendo una red de cambios que eran la amenaza para estos pseudopolíticos que llegaban servían a sus amos imperiales y se iban llenos de dinero, traiciones e inequidad. Por esta causa hubo más de 600 asesinatos de los cuales se pueden comprobar 484, que espero AMLO los recuerde para que su muerte sea dignificada por el cambio de poderes en su memoria, porque su muerte no fue estéril.
Los casos más esquizofrénicos en cuanto al poder fueron los de Fox y Calderón. El primero porque compartió el poder con una mujer perversa, ambiciosa y santurrona, llena de hipocresía. El segundo, porque vicioso de cuerpo y espíritu, por órdenes de George Walker Bush, desató una guerra que ha llenado de luto a más de cien mil hogares mexicanos.
Hoy que se va Enrique Peña Nieto, tenemos que exigir el 21 de marzo en la consulta que se hará, que se les llame a cuentas para que ni haya perdón y menos olvido. Porque la muerte de más de 230 mil mexicanos quedaría impune si Andrés Manuel, cuando menos no los pone frente a un jurado emulando el juicio de Nuremberg en donde los que comparecieron, pagaron con su vida y con cárcel sus asesinatos, crímenes y vilezas en contra de los pueblos Europeos.
Para eso queríamos un cambio de poderes, para eso hicimos ganar a López Obrador, pese a que muchos aventureros y corruptos asalta presupuestos ya se le metieron en su equipo de trabajo.
Por la memoria de los mártires asesinados por la fiera neoliberal en manos de Salinas, Zedillo, Fox, Calderón y Peña Nieto, ¡Pedimos justicia!, por la sangre derramada en busca de cambiar los poderes de la Unión ¡Queremos Justicia!, porque haya paz en México para beneficio de nuestras familias y seres queridos ¡Exigimos justicia!
De no ser así, nuevamente todo se quedaría en buenas intenciones y eso sería una gran traición a nuestra historia. Lo que me hace exigir que estemos pendientes de las acciones de este gobierno que se enfrenta a criminales ocultos de Salinas y que buscan la primera oportunidad para dar el golpe en contra de quienes quieren y exigen soluciones para abatir la pobreza de los mexicanos. Para eso y antes que todo ¡Exigimos cárcel y justicia! Para los cinco expresidentes traidores y asesinos. ¡Queremos justicia! Vale…