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¿Alguien cree en Armenta?
Noticia publicada a
las 01:36 am 22/12/25
Por: Adrián Ruíz.
En caída libre. La nula credibilidad de Alejandro Armenta entre los gobernados. Tiene a su gobierno contra la pared. ¿Cómo creer a un mitómano? ¿Cómo creer a alguien que promete y promete y nada? ¿Cómo creer a un gobernante corrupto?.
Basta un vistazo superficial a los integrantes de su gabinete.
Para percatarse de que está hecho. Basta observar los primeros 12 meses de gobierno. La mentira es su sello característico. Las equivocaciones se suscitan una tras otra.
Resulta increíble para un gobierno plagado de desaciertos que utilice las tragedias humanas como distractores. Frente a una primera desgracia –pérdida de vidas en arrancones clandestinos-.
La solución -irracional- que propuso fue: un autódromo especial para arrancones. El interlocutor no fue otro que el monumento a la corrupción: José Luis García Parra “El Choco”.
Luego una segunda tragedia. La respuesta para poblanas y poblanos: no más vehículos con placas foráneas. En está ocasión la que salió a escena para el show fue la secretaria de Movilidad y Transporte. La no menos corrupta Silvia Tanús, quién sin empacho inventó millones y millones de infracciones por automóviles con placas de otros estados.
Del otro lado del telón del teatro un comunicador, busca desesperado a una joven de 21 años -presunta responsable- para encarcelarla. Aduciendo “que se pudra en San Miguel”. Hacer leña del árbol caído es característica de un personaje al que el chantaje y la extorsión lo tuvieron tras las rejas.
A pesar de tener la cara sucia por la deshonestidad -hampón- con la que se maneja como comunicador. Ahora trata de agradar al que paga -Alejandro Armenta-. Y contribuir con la función de distracción. Día a día atiza leña al fuego para localizar a la joven inmadura que generó con su imprudencia la muerte de dos de sus amigos.
La chillante voz -del comunicador- que clama prisión en videos de tik tok. Es la misma que durante el gobierno del muerto -Gerónimo Barbosa, quién lo encarceló-, pedía clemencia. Nunca entendió el mensaje. Más bien nunca aprendió a vivir de otra cosa que no fuese estirar la mano al estado, traicionar y extorsionar.
Las obras de teatro que se continúan montando por parte del gobierno del estado. Fomentan más molestia que agrado ente la ciudadanía. Existen mecanismos propios para emplacar en Puebla. Pero no hay talento para implementarlos. Lo mismo mecanismos para traer a la joven que imprudentemente, ocasionó dos muertes pero un estado represor y de ocurrencias no da para más.
Diferente sería pedir a la chica que se entregue y se someta a un proceso justo e imponer una sanción. Si, bien ejemplar no estrictamente de absoluto encierro o prisión. Hay formas de generar reflexión social y más aún de inducir a la juventud a modificar ciertos patrones de conducta. Sin embargo el gobierno de Alejandro Armenta, acusa limitaciones alarmantes.
¡Soluciones a la ligera!
Reporte del Informante
Inoperancia de SMyT.
La incapacidad de Silvia Tanús para regularizar y modernizar el transporte público. La tienen con un pie fuera de la Secretaría de Movilidad y Transporte. Pero no podía irse sin cristalizar otro de sus “chistes”. Convertir en corralón las instalaciones de la exdirección de Vialidad Estatal.
A la señora se le ocurrió desalojar al personal administrativo que aún laboraba en el edificio de la 105 poniente en la colonia Coatepec. Para albergar a patrullas de la policía e impedir que sean utilizadas para las labores de vigilancia. Por supuesto con la venía de Alejandro Armenta.
Aunque parece irreal los elementos de vigilancia, dejaron un hueco en la supervisión de carreteras estatales, regulación del tránsito vehicular. Por supuesto practicaban la corrupción. Pero cumplían una labor necesaria.
Silvia Tanús acabó de enterrar lo que aún quedaba de la Dirección de Vialidad. Con todo y los atropellos. Ponían orden en una ciudad desquiciada por el tránsito vehicular.
Pero sobre todo eran una piedra en el zapato para huachicoletos, huachigaseros, gobernantes y funcionarios, involucrados en el negocio del robo de combustibles. Sí, porque los guardianes que no estaban al tanto. Ignoraban la orden de no detener a pipas y camiones que transportaban el producto robado.
Las detenciones causaron problemas para los involucrados en el negoció. Y como no era conveniente. Se decidió su desaparición. La libre circulación de los vehículos está protegida.
¡Conveniente desaparición!