Noticia publicada a las 02:36 am 12/06/18

Por: Rogelio Martínez Huerta.

Desde el inicio de las campañas, los candidatos se enfrascaron en una guerra de acusaciones poco honestas, señalamientos de corrupción y de lado se quedaron las propuestas. No sé bien a bien si fue una táctica para no hacerse responsables de dar solución a los conflictos del Estado, del país o de los municipios, o de plano se debe a la improvisación que Miguel Barbosa en Puebla determinó con el nombramiento de candidatos que no eran ni son ni serán de Morena y menos conocen de política. Por ejemplo…

He estado presente en los mítines que los candigatos de Morena, del PT, del Verde, del PRI, del PAN y del PANAL han realizado y sus planteamientos en lo general, se salen de la realidad. Porque los candidatos a diputados prometen como si fueran por la alcaldía y los candidatos a la presidencia, prometen como si fueran la réplica de Santa Claus.
El único que se salva de mi crítica es Félix Alejo, porque he comprobado que sí sabe de lo que habla y acepto que antes de hablar de los temas, los desglosa certeramente, dando una explicación magnífica de cada asunto que trata de lo concerniente al futuro ayuntamiento de Tehuacán, ciudad popoloca que va hacia atrás gracias a este sistema político poblano.
Respecto al debate de los candidatos a la gubernatura, sé por los medios que lo ganó Martha Éricka y no me extraña. Porque viene bien preparada para la contienda y en relación con el Estado es la única que ha entregado en mano propia los apoyos que el gobierno otorga a las masas campesinas y a sus hijos que tanto necesitan.
Miguel Barbosa cumplió su anhelo de ser candidato a gobernador. Lo grave es que su soberbia lo cegó y no se dio cuenta de que el sistema político poblano lo va a rebasar y lo aplastará como previamente lo he comentado.
Para colmo, su tráfico de influencias conocido desde que fue nombrado Coordinador de la bancada del PRD y que lo llevó a la ruptura con los “chuchos”, más sus negocios oscuros con Videgaray y otros politicastros de corte salinista-peñista lo enriquecieron a más no poder y pese a que le exhiben algunas riquezas, creo que habrá que hurgar si algo tiene de la venta de PEMEX. Porque también estuvo en el Pacto por México y a todos los coordinadores les tocó una gran tajada de miles de millones.
Quede bien claro, desde simples diputados del PRI, hasta senadores y demás caterva les tocó parte de las mochadas, del tráfico de negocios como parte de las componendas para entregar los energéticos al capital privado ¿Así como no va a tener el candidato de Morena en Puebla un tremendo dineral que se oculta entre varios prestanombres, tal y como me lo han comentado?
En fin, la ventaja del dinero es que circula para bien y para mal y ninguno de los multimillonarios que han muerto y que conocí, se llevaron algo a la tumba. Todo lo contrario, en los estertores de su agonía, clamaron a dios que no los escuchó por obvias razones.
En esta elección hemos visto faltas de moral, de sabiduría, de ética y sobre todo de cordura. Es como si la política los hubiera enloquecido a muchos y a otros los hubiera apendejado. No midieron distancias, menos valores y se enfrascaron en una lucha por quedarse con algún puesto, para seguir medrando al amparo del sistema, que no cambiará Andrés Manuel. Porque no tiene una varita mágica para eliminar a tanto cabrón ladrón. Por eso ya no me emociona nada de lo que suceda.
Bien lo dijo Hernández Toyo: “a los pendejos la política los enloquece y a los inteligentes los apendeja”. Solo faltó agregar que a los sensatos los llena de nueva sabiduría y a los psiquiatras de nuevos clientes en su diván. Sea…

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